Caminando
por la calle, cuando no voy de afán y me encuentro de buen genio, mi mente
suele dispersarse observando las “pintas” de la gente. Y no precisamente porque
me importe que use cada quien, en el fondo me es indiferente, pero me llama la
atención como me siento de atraída por la apariencia o aspecto que irradia la
gente que no usa medias.
Hay
algo en su “look” que revela un aire relajado en su interior, como si esta
gente deambulara caminando cómodo en su propio cuerpo y en su misma vida. No sé
qué pasa por mi mente en ese instante, pero es como si me identificara con un
estilo casual de vida donde no hay tantas reglas y protocolos.