Hace
poco estuve hablando con una amiga, quien está considerando salirse de la casa
de sus papas para independizarse, y me hace pensar si en su situación lo haría
o no lo haría. Días después me detengo, analizo y me llama la atención nuestra
conversación ya que este tema siempre lo he tenido en mente porque encuentro varios pros y contras de
mantenerse anidado a la casa de los padres, o más bien al “Hotel Papas” que es
en lo que acaba por parecerse.