jueves, 17 de agosto de 2017

Existe un Escaso Nivel Educativo en Alimentacion

Hace dos años escribí sobre la alimentación en mi post de “A Revisar la Despensa” donde resumo mis desórdenes alimenticios anteriores (nada grave, aclaro) y el pequeño cambio de conciencia que he tenido en mis últimos años respecto a la alimentación.

Pero sigo teniendo cierta inconformidad en mi relación con temas de alimentación y me doy cuenta que no soy la única, somos muchos, inclusive creería que la gran mayoría, a quienes nos cuesta inclinarnos por escoger una comida sana, una comida que realmente nutra  nuestro organismo y le de la energía idónea para vivir.


Y no es culpa mía, ni de mi mama, ni de mis amigos. Es el entorno el que nos está empujando a consumir comida o más bien productos procesados. Son las empresas quienes con su marketing y campañas publicitarias nos están atrayendo a consumir productos que desplazan a los alimentos reales.

Y como no caer seducido a la explosión de sabores, texturas y mayor aun a la facilidad que brindan varios productos que conseguimos en el supermercado y nos facilitan todo el proceso que implica la alimentación. Pues siendo franca mantener un hogar a punta de ciento por ciento alimentos frescos y naturales es complicado.

Lo que me molesta es que hemos sido la presa perfecta de ciertas empresas. Hemos sido hábilmente seducidos por empresas que venden alimentos o productos alimenticios cuyo real objetivo ni siquiera se acerca a la salud, en ciertos casos nos alejan de la salud interfiriendo negativamente al desarrollo de nuestro organismo.

Siento que hoy en día con tantas facilidades que este mundo moderno nos presenta se ha venido perdiendo la cultura culinaria de nuestros ancestros, que se trasmitía de generación en generación.

No soy nadie para decir que está mal o que está bien, pero si veo como hoy la gente invierte poco tiempo en escoger lo que le brindamos a nuestro cuerpo. Estamos ocupados en hacer, tener, lograr, ser papas..etc. Y es nuestro cuerpo quien nos va a permitir hacer todas las cosas anteriores, así que tenemos que cuidar de él  si queremos seguir disfrutando tantas cosas.

El cambio de hábitos requiere de un proceso de ajustes que solo se irán logrando con el tiempo. Podemos hacer pausas y planear mejor que le vamos a brindar a nuestro organismo. Cada quien en su casa decidirá y manejará su propio proceso.

Pero me sigue inquietando el silencio de nuestra sociedad. ¿Por qué  vemos campañas contra el tabaco, contra el licor, contra las drogas y no contra ciertos productos que son dañinos?. Para poner un ejemplo especifico. ¿Qué paso con el impuesto a las bebidas azucaradas? La propuesta fue rechazada, claro está, generaría un impacto a los comerciantes. Una vez más prima la economía sobre la salud pública.

Existe un conflicto de intereses entre el dinero que hay de por medio y la salud de cada uno de nosotros. Debemos luchar contra tantas enfermedades asociadas al azúcar. Requerimos como sociedad concientizar y apoyar en la educación de nuestros pequeños.

Nuevamente invito a las instituciones educativas a promover el tema e incluir materias de carácter obligatorio respecto al tema. También invito a mis amigos y familiares a abrir una puerta que nos lleve a aprender de algunos consumidores que están buscando salud y bienestar.


Buen provecho!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario